A día de hoy, lo que más le conviene a España es acudir al fondo de rescate o como quieran llamarlo. Los intereses que estamos pagando por la emisión de deuda es inasumible a medio plazo, así que lo mejor es salirnos temporalmente del juego del mercado y echar mano a ese dinero a fondo perdido que nos permitiría cuadrar números poco a poco. Si no lo hacemos es por la misma razón que se negaban los irlandeses, por orgullo nacional, que en nuestro caso es de puta risa. Sí, es cierto que sería el reconocimiento de un fracaso por parte del gobierno, pero no estamos aquí para salvarle la cara a este gobierno, sino para evitar una hipoteca gigantesca para próximas generaciones. Alemania está dispuesta a soltar la pasta, pero lo que no está dispuesta es a hacerlo sin controlar el destino de esa pasta. Necesitamos una intervención YA, que arrincone el debate político y autonómico al trastero de nuestros fantasmas nacionales.
3 comentarios:
Estoy de acuerdo, pero temo una cosa, y es que eso, al final, se transforme en un éxito de los mismos que nos están arruinando. Si se hace el rescate con el gobierno actual y las cosas empiezan a dejar de hundirse, los necios votantes españoles volverán a votar a los mismos, porque al final no habrá llegado la sangre al río. Espero que el rescate no se produzca antes de que estos se vallan a casa, peor por ahora se dedican a imponer estados de alarma en los que no se pueden convocar elecciones.
Lo mejor que nos puede pasar es que se convoquen elecciones ya, con eso la confianza de los inversores empezaría a aumentar en previsión de un probable cambio de gobierno, y una vez cambiado el gobierno ya veríamos si las hay cambios radicales o sería conveniente echar mano al rescate.
Si creo que la intervención es el mejor de los males en este momento es porque la oposición a este catastrófico gobierno es un partido que se opone a la congelación de las pensiones en 2011 y firma al mismo tiempo un pacto para ampliar el periodo de cotización de las pensiones que las condena a una drástica reducción, si es que se cobran.
Se opone ahora porque está en la oposición, pero en cuanto esté en el gobierno las congelará. El pacto tiene que firmarlo porque seguirá siendo válido si llegan a gobernar.
Lo que tenemos es una oposición que se mueve entre la apatía total y el querer copiar las tácticas a sus oponentes políticos, con el hándicap de que no saben hacerlo.
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