jueves, 1 de marzo de 2012

168º paso en el búnker

Conmigo que no cuenten para hacer corrillo en el patio del colegio y señalar con el dedo a fulano o mengano, porque al parecer no devuelve el dinero prestado. Quiero aclararles a aquellos que no me conocen, que yo nunca he prestado ni prestaré dinero. Por una sencilla razón: no soy un prestamista. Si alguien cercano a mí necesita dinero y tengo excedente, lo doy sin esperar que me lo devuelvan. Si no tengo excedente (que es la gran mayoría de las veces) no lo doy y punto. Lo que no hago es prestar esperando la devolución como un perro de presa. Así que es inútil buscar en mí la complicidad para criticar al que recibió el dinero. En mi opinión, el prestamista es un tipo que va de bueno, que busca mejorar su prestigio a los ojos del otro, pero que no quiere perder ni un céntimo del saldo. Dicho queda.

2 comentarios:

Interruptor dijo...

¡¡El prestamista es un usurero y el prestatario un pardillo!!

Conmigo puedes contar para hacer corrilo en el patio del cole y poner verde a los dos.

Es que con esta crisis tengo tan mala leche encima que despotrico contra quien sea con tal de liberar un poco de tensión.

Luis Amézaga dijo...

No pasa nada con los desahogos, mejor eso que ahogarse.