tag:blogger.com,1999:blog-88068714239268584032024-03-16T11:52:23.374-07:00El Búnker TravestidoSolo usaré la inteligencia como último recurso. Tampoco quiero abusar. Luis Amézagahttp://www.blogger.com/profile/14894828361586400904noreply@blogger.comBlogger686125tag:blogger.com,1999:blog-8806871423926858403.post-6272528320719306442024-03-14T02:30:00.000-07:002024-03-14T02:30:00.131-07:00El zumbido del que subyace-72<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiAw3LSbF7skMypcOi_pHQzxiGnzjcDYRIgmZSeQpvHbomLsd6fRm9x2UaOj_Ohzz6iQbK2o4cKvfTEWAS7HEj-lKBT5mnU6W0VHLcOFxbxuZar2j0AnWaHl_MDo481tlB8B08ONhHtPESvFO35dPfhocg4yUGmwM1V0XhatsNMhRcf1HEzrnN_GplM6zZ9/s500/pedregoso.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="500" data-original-width="489" height="411" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiAw3LSbF7skMypcOi_pHQzxiGnzjcDYRIgmZSeQpvHbomLsd6fRm9x2UaOj_Ohzz6iQbK2o4cKvfTEWAS7HEj-lKBT5mnU6W0VHLcOFxbxuZar2j0AnWaHl_MDo481tlB8B08ONhHtPESvFO35dPfhocg4yUGmwM1V0XhatsNMhRcf1HEzrnN_GplM6zZ9/w402-h411/pedregoso.jpg" width="402" /></a></div><br /><p></p><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;">Parte
desde donde estés: coge tus ideas, tu situación vivencial, lo que piensas de
ti, tus creencias, y mételas en la mochila. Échate la mochila a la espalda y
ponte a andar como un peregrino sin destino. La vida es una búsqueda del
tesoro. ¿Por qué da igual cuál sea tu equipaje? Porque a los pocos kilómetros
te darás cuenta de que andas demasiado despacio por culpa del peso, así que
sacarás (sean las que sean) tus circunstancias de la mochila y las dejarás a un
lado del camino. ¡Así da gusto caminar! Después de meses de caminata aparentemente
desorientada, asumes que no vas a ninguna parte, que no sabes en qué consiste
el tesoro que buscas. Tú escondiste el tesoro, tú lo has estado buscando y
tú eres el mismo tesoro. El paisaje y el camino se transforman en atrezzo, en
música de fondo. Vuelves sobre tus pasos, pero no son los mismos pasos. Vuelves
porque eres un peregrino para quien ninguna tierra es extraña ni ningún camino
es de huida. <span style="mso-spacerun: yes;"> </span></p><br /><p></p><div class="blogger-post-footer">Textos Luis Amézaga. Búnker travestido.</div>Luis Amézagahttp://www.blogger.com/profile/14894828361586400904noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8806871423926858403.post-85517449817164829452024-02-27T01:30:00.000-08:002024-02-27T02:05:11.323-08:00El zumbido del que subyace-71<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhc5VcwoXG7y3g3oymKZw2bBELm21TFrRy3lYHRzFTb00XDnrRuFCBfZF_H-6Co59HZVA1IOL4qY5dz_fTKK9m_EXFYjjotOtF9R9N-Y0GxvOu7vk81vvKAhiNUMVJn8iv0kaEWf0i6QwPjc-jsRkmZdPOX2Q7OyiOapDIq8725c36cDpcbe1F6BD_JmupG/s650/249_3rostros116.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="650" data-original-width="433" height="517" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhc5VcwoXG7y3g3oymKZw2bBELm21TFrRy3lYHRzFTb00XDnrRuFCBfZF_H-6Co59HZVA1IOL4qY5dz_fTKK9m_EXFYjjotOtF9R9N-Y0GxvOu7vk81vvKAhiNUMVJn8iv0kaEWf0i6QwPjc-jsRkmZdPOX2Q7OyiOapDIq8725c36cDpcbe1F6BD_JmupG/w344-h517/249_3rostros116.jpg" width="344" /></a></div><br /><p></p><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;">Pensamos
que la compasión es algo connatural a una buena persona. No lo es. Una buena
persona es solo una buena persona. No posee ninguna condición diferente
respecto a lo que calificamos como mala persona. La compasión nada tiene que
ver con los buenos sentimientos, ni con la filantropía, ni con una actitud
moral. La compasión no puede surgir de la persona, sino de lo impersonal. La
compasión es no confundirse con lo falso, con la pasión; es abrir espacio a lo real, reconocer
al ser aunque la persona se empeñe en amordazarse en sus condicionamientos de
tiempo, espacio, memoria e historia melodramática. <span style="mso-spacerun: yes;"> </span></p><br /><p></p><div class="blogger-post-footer">Textos Luis Amézaga. Búnker travestido.</div>Luis Amézagahttp://www.blogger.com/profile/14894828361586400904noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8806871423926858403.post-38621051828073607442024-02-22T01:30:00.000-08:002024-02-22T01:30:00.123-08:00El zumbido del que subyace-70<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEg_jfVo08KLZuS-N1IDRrGwA91DhKUTxbf0G7ctJUGfpFugF5oXISalT4YUY2Kjrt4RaK7QitzCjwV14MNH422ee4O5TdEHMBrGBrUHkMEcMi3dqFdBdj5BlDXGSvANYFsuawL6KXtAnKrx_IpXWJaSFqlUqj-UFVDl9_f4kxCK6JWMfi-AmUHCCeASP-jD" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="600" data-original-width="600" height="342" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEg_jfVo08KLZuS-N1IDRrGwA91DhKUTxbf0G7ctJUGfpFugF5oXISalT4YUY2Kjrt4RaK7QitzCjwV14MNH422ee4O5TdEHMBrGBrUHkMEcMi3dqFdBdj5BlDXGSvANYFsuawL6KXtAnKrx_IpXWJaSFqlUqj-UFVDl9_f4kxCK6JWMfi-AmUHCCeASP-jD=w342-h342" width="342" /></a></div><br /><p></p><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;">Construyes
una caja y no necesitas meter espacio en ella. No hay un espacio dentro de la
caja y otro fuera. Es la caja la que ha aparecido en el espacio. La caja es el
cuerpo. El espacio no está dentro del cuerpo, es el cuerpo el que está en el
espacio. ¿Quieres descubrir cuál es tu identidad en esta analogía? Tú eres el
espacio continuo e infinito. A diferencia de la caja, del cuerpo, tú no
apareces en un momento dado. Cuando tiras la caja al contenedor no tiras con
ella el espacio. El espacio permanece inalterado. Tú permaneces intacto aunque
tiren el cuerpo al contenedor, lo metan bajo tierra o lancen al mar sus
cenizas. El espacio no va a ninguna parte ni viene de ninguna parte. <span style="mso-spacerun: yes;"> </span></p><br /><p></p><div class="blogger-post-footer">Textos Luis Amézaga. Búnker travestido.</div>Luis Amézagahttp://www.blogger.com/profile/14894828361586400904noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8806871423926858403.post-57684155636024536622024-02-15T01:30:00.000-08:002024-02-15T01:30:00.141-08:00El zumbido del que subyace-69<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh3aHPBhkbnmQHBApJfGAovjyuNICgQsB2gVpxWe-tn-_mDnF6ia3Papn54icmHLunHey7LgUK5KwEzh8QiyByfSU-DGzlNx_zPcrOU3y3nHd8yvxVtCSBP_diM-SYPTyz4u0LTqxtEXqnQP5Ck00DRAObGwl5hl2HPJDvz_msyTimAiTwgM1L9-ckZtPOB/s2592/Puerta89.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="2592" data-original-width="1952" height="490" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh3aHPBhkbnmQHBApJfGAovjyuNICgQsB2gVpxWe-tn-_mDnF6ia3Papn54icmHLunHey7LgUK5KwEzh8QiyByfSU-DGzlNx_zPcrOU3y3nHd8yvxVtCSBP_diM-SYPTyz4u0LTqxtEXqnQP5Ck00DRAObGwl5hl2HPJDvz_msyTimAiTwgM1L9-ckZtPOB/w369-h490/Puerta89.jpg" width="369" /></a></div><br /><p></p><p></p><p class="MsoNormal" style="tab-stops: 25.9pt; text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;">A cada paso una puerta que lleva a ti mismo. A cada edad
muerta —y ya llevas unas cuantas— se abre una puerta a ti mismo. Cada sueño de
cada noche, cada niebla antes de la vigilia, cada día de ajetreo, una puerta
que lleva a ti mismo. Cada viaje y cada aventura por el mundo se abre una
puerta que lleva a ti mismo. Nunca se acabarán las opciones de ti mismo. Nadie
te mete prisa, prueba todo lo que consideres oportuno, juega a todos los
juegos, engorda el ego con comida basura, haz lo que tengas que hacer, pero
alguna vez, aunque sea por descarte o curiosidad, cruza esa puerta que lleva a
ti mismo.</p><br /><p></p><div class="blogger-post-footer">Textos Luis Amézaga. Búnker travestido.</div>Luis Amézagahttp://www.blogger.com/profile/14894828361586400904noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8806871423926858403.post-72343797133504703832024-02-10T01:30:00.000-08:002024-02-10T01:30:00.125-08:00El zumbido del que subyace-68<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEicvYcF9ZoombHP5q6U9hawyuS4xsFt0hykwQhMzQ0dvuYv62puXDUWXiD9JhNodiH8ZV7vtKi-HFLQW6Q-nGMx85AYXjpw_mONcspV7qTz4GiO8_S01Rt-hHrDlgD8yNkHhJ_HR6DbxS2NVmi0Kk6wWpw88k9JLo4PLJk0V7P3t6zReB429zgGyrItEu3a/s654/2010042684modeloegiptoINT_m.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="430" data-original-width="654" height="338" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEicvYcF9ZoombHP5q6U9hawyuS4xsFt0hykwQhMzQ0dvuYv62puXDUWXiD9JhNodiH8ZV7vtKi-HFLQW6Q-nGMx85AYXjpw_mONcspV7qTz4GiO8_S01Rt-hHrDlgD8yNkHhJ_HR6DbxS2NVmi0Kk6wWpw88k9JLo4PLJk0V7P3t6zReB429zgGyrItEu3a/w515-h338/2010042684modeloegiptoINT_m.jpg" width="515" /></a></div><br /><p></p><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">La facultad sensorial otorga la experiencia y crea la
escena. Sin la facultad sensorial no hay contenido. Pero los sentidos, a su
vez, necesitan un soporte vital para operar. Sin ese soporte, el cuerpo caería
desplomado al suelo desapareciendo cualquier experiencia. Ese soporte eres tú.
No tiene nada que ver con el cuerpo ni con sus funciones. Ese soporte es el que
permite reconocerte a pesar de los cambios aparentes de la forma. Da igual que
te trasplanten el corazón, el hígado, los riñones, los genitales, que te
renueven toda la sangre, que te cambien la cara con cirugía estética. Sabes que
eres tú. No de forma intelectual, sino íntima, el saber que es indubitable. Da
igual que tu cuerpo y tu mente con diez años nada tengan que ver con tu cuerpo
y mente de cincuenta años. Sabes que eres tú, el mismo. Da igual que tus
pensamientos, ideas y creencias hayan cambiado. Sabes que eres tú, el mismo. Da
igual que estés en el estado de vigilia con los sentidos a pleno rendimiento o
en sueño profundo sin referencia del cuerpo ni del mundo. Eres tú. Esa
continuidad es porque tú no cambias. Lo que no cambia es lo único real en
estado puro. </p><br /><p></p><div class="blogger-post-footer">Textos Luis Amézaga. Búnker travestido.</div>Luis Amézagahttp://www.blogger.com/profile/14894828361586400904noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8806871423926858403.post-1900856270657753582024-02-03T01:30:00.001-08:002024-02-03T01:30:00.141-08:00El zumbido del que subyace-67<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgvT1G525uTw9vW7VhFIO6wqPLbK0OKLJZQUPno3bL8SlEapKkNqdIkoqTZ1E0-XWTNTV1h8qvzcZTpo_Cw3zIZ6SwsZHcWj3oLkeuxJHCBIu7Cn9vZ4yHVyho2YWTnCo8vCIbRf2NIgYl3oWM6SW3w7s910IThFi4l7yJV9ftIKq6jdDAyDTor8taSJFl6/s375/440.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="375" data-original-width="373" height="395" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgvT1G525uTw9vW7VhFIO6wqPLbK0OKLJZQUPno3bL8SlEapKkNqdIkoqTZ1E0-XWTNTV1h8qvzcZTpo_Cw3zIZ6SwsZHcWj3oLkeuxJHCBIu7Cn9vZ4yHVyho2YWTnCo8vCIbRf2NIgYl3oWM6SW3w7s910IThFi4l7yJV9ftIKq6jdDAyDTor8taSJFl6/w393-h395/440.jpg" width="393" /></a></div><br /><p></p><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;">Es
este instante. No hay otro. Es vertical. En la línea vertical no hay
diferencias, sea cual sea la altura a la que te sitúes. Las diferencias son
propias de la línea horizontal, temporal, de los cambios en la forma. Este
instante es el aquí y el ahora, sin otro aquí y ahora. Este instante es el ser
atento a sí mismo. Cuando el ser se expande y está atento a esa expansión
aparece el universo, y sus formas adquieren perspectiva. El ser es uno, sus
movimientos son dos: contracción y expansión. </p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;">Estás
en una habitación: hay un escritorio, una silla, unas baldas, una cama, un
armario, una ventana, una puerta, un cuerpo humano (con el que te identificas),
una lámpara, un suelo, una alfombra y cuatro paredes. Para observar la escena
en su totalidad y libertad, el testigo no puede asumir un centro de observación
desde ninguna de las formas que pueblan la habitación. ¿Desde dónde concibe la
escena entonces? Desde el espacio vacío. Ese es el estado natural del ser.</p><br /><p></p><div class="blogger-post-footer">Textos Luis Amézaga. Búnker travestido.</div>Luis Amézagahttp://www.blogger.com/profile/14894828361586400904noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8806871423926858403.post-88847555327972607302024-01-31T01:30:00.001-08:002024-01-31T01:30:00.146-08:00El zumbido del que subyace-66<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiEN6-E54Jox6g7NVBY95q_sk5k6OAPhNYdjOmMFF_U69G-PRAsq7krhlHjn53zQLg_IvG0AUjxSWOvNf9TzMLOhlWIE-bhgDWfFV3__49jii_ZJFyy1emhyphenhyphenO7TjqFvBykT0w_Bc1rduG7qhs4C0Hok9j327obt8TWltrjqGQ6HIJvEDsxux2VI8E2X8r97/s380/luna.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="252" data-original-width="380" height="304" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiEN6-E54Jox6g7NVBY95q_sk5k6OAPhNYdjOmMFF_U69G-PRAsq7krhlHjn53zQLg_IvG0AUjxSWOvNf9TzMLOhlWIE-bhgDWfFV3__49jii_ZJFyy1emhyphenhyphenO7TjqFvBykT0w_Bc1rduG7qhs4C0Hok9j327obt8TWltrjqGQ6HIJvEDsxux2VI8E2X8r97/w459-h304/luna.jpg" width="459" /></a></div><br /><p></p><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;">La
belleza de la Luna llena reside en su vacío y en que no espera nada de ti. La
belleza de la Luna llena proviene de una luz que no es suya, prestada por un
amor desinteresado de estrella. La belleza de la Luna llena está en tus ojos,
que miran lejos como si estuviera cerca. La belleza del Cosmos mora dentro de
ti. Vuelve la atención hacia dentro, encontrarás un descomunal agujero negro.
La mente abandona las formas dispersas por el universo y atrae la materia hacia
su horizonte de eventos. Las criaturas de gas bajan en espiral hasta que se
funden con lo incorpóreo. El agujero negro de tu interior no tiene bordes ni
superficies rígidas, no posee atributos externos visibles, en él millones de
galaxias se concentran en la punta de un lápiz, logrando un poder de atracción
infinito, una densidad inusitada. En él se produce la singularidad, las leyes
de la física dejan de funcionar, el espacio-tiempo se convierte en una ideación
limitante. La característica que más impresiona de este agujero negro de tu
corazón es la combinación de simplicidad y poder. De la succión de todo lo
visible extrae su invisibilidad. <span style="mso-spacerun: yes;"> </span></p><br /><p></p><div class="blogger-post-footer">Textos Luis Amézaga. Búnker travestido.</div>Luis Amézagahttp://www.blogger.com/profile/14894828361586400904noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8806871423926858403.post-8104540358544756022024-01-28T01:30:00.001-08:002024-01-28T01:30:00.135-08:00El zumbido del que subyace-65<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhjwk1rlcwkeB2vC6umAezv5erKfpDg6-91rIs-52-sdgOYDCgdW-xf2zAmJjb1wo5qvB06Wdf02gxlyNywDY3Hh9wUZcsIYXOX9YaReJ_V8di9O16GxfX6emhBQwN_XNlizyw66j6NfnbYG0m4YfA7r6uQkqCGmlKVQjVNVM6dxa73U-g_n8mCNxGoB8wx/s500/mariposamanzana.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="421" data-original-width="500" height="372" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhjwk1rlcwkeB2vC6umAezv5erKfpDg6-91rIs-52-sdgOYDCgdW-xf2zAmJjb1wo5qvB06Wdf02gxlyNywDY3Hh9wUZcsIYXOX9YaReJ_V8di9O16GxfX6emhBQwN_XNlizyw66j6NfnbYG0m4YfA7r6uQkqCGmlKVQjVNVM6dxa73U-g_n8mCNxGoB8wx/w443-h372/mariposamanzana.jpg" width="443" /></a></div><br /><p></p><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;">Muchos
son los maestros, sabias sus palabras. La realización en ellos no se pone en
duda. Y, sin embargo, en ocasiones sus analogías, sus señalizaciones, sus
mensajes saben a comida recalentada. La frescura de la presencia queda solapada
por el discurso. Alguien con sincero anhelo de estabilizar su libertad, no
busca en el maestro sus palabras, ni la transmisión directa de la iluminación,
ni experiencias extrasensoriales; sólo quiere su compañía, contemplar cómo
prepara la comida, riega las plantas, pinta una pared, se atusa el pelo, se
toma una copa de vino. Sólo quiere comprobar de primera mano,<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>sobre el terreno, eso que parece imposible a
ojos de<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>alguien con la libertad sin
estabilizar: cómo se compatibilizan dos estados aparentemente opuestos, cómo
casa lo mundano con la realidad del espíritu. El maestro cree que debe decir
algo, pero el discípulo le ruega que se calle porque está a punto de descubrir
que nada es incompatible con la unicidad del espacio sin bordes al verle pelar
una manzana. </p><br /><p></p><div class="blogger-post-footer">Textos Luis Amézaga. Búnker travestido.</div>Luis Amézagahttp://www.blogger.com/profile/14894828361586400904noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8806871423926858403.post-60646408080093837922024-01-25T01:58:00.001-08:002024-01-25T01:58:00.129-08:00El zumbido del que subyace-64<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgWowrxegyRnduoDrinhin4GyCRyBSJQwKpndnzzd5iYaG-TMtkrdi_kz6QeW4LrePORxS-kgHfVMpHeEzrM2Jk8S0HA2LHh9pYYY__SznlPw0S5SDo0Vs46xNHYuRE_vdlfvvQwIc2_VppZW50GX7HfFqC8-EM9DFtLVbe8CGulITJf7v2c2xCKYWQoqrN/s881/barca.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="628" data-original-width="881" height="329" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgWowrxegyRnduoDrinhin4GyCRyBSJQwKpndnzzd5iYaG-TMtkrdi_kz6QeW4LrePORxS-kgHfVMpHeEzrM2Jk8S0HA2LHh9pYYY__SznlPw0S5SDo0Vs46xNHYuRE_vdlfvvQwIc2_VppZW50GX7HfFqC8-EM9DFtLVbe8CGulITJf7v2c2xCKYWQoqrN/w462-h329/barca.jpg" width="462" /></a></div><br /><p></p><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;">Cuando
lo que eres se aviene a ser percibido por tus sentidos es como experimentar la
vastedad de la naturaleza a través de un tiesto en tu ventana. </p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;">La
mente es contenido hipnótico. La conciencia es continente impersonal. Puede
haber continente sin contenido, pero no al revés. La mente puede morir de
inanición por falta de atención. Esa muerte en vida le hará brillar como nunca,
porque es una muerte del contenido manoseado, del plato recalentado de la
memoria. La conciencia de ser acaba por disolverse en el ser que no precisa de
conciencia. El sufrimiento viene de creer que el contenido, bien hilado y de
apariencia continua, es lo fundamental. La continuidad solo la posibilita el
continente. </p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;">La
mente, aunque parezca colaborar en su propia destitución de anquilosadas
costumbres, guarda tensiones en el cuerpo que desembalsa de manera abrupta e
inesperada, mostrando aún su desarmonía con el papel secundario de colorear que
le corresponde. Esas pataletas desaparecerán si no les prestas atención, si a
la mente no le cedes tu identidad. Es tu atención y el otorgamiento de
importancia lo que las provoca y agranda. Mantente en ti ¿Dónde si no? En el
fondo del océano, donde el oleaje no interrumpe la paz.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;"><br /></p><p></p><div class="blogger-post-footer">Textos Luis Amézaga. Búnker travestido.</div>Luis Amézagahttp://www.blogger.com/profile/14894828361586400904noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8806871423926858403.post-23054469769959945312024-01-22T01:30:00.001-08:002024-01-22T01:30:00.157-08:00El zumbido del que subyace-63<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiTRLt15tKQwaTVYsaZHKE5eUchRxJW5qaq466hEnOeJQHaX-UHOSdvOGB-3Ph1YCUbVNvzbBgzVKPSJiXLllXft4-r9wQU_3i-DvnygDBi5ipESr5bI0Cp9JaIcA00SQze6KEufTcVthJdTaMLbfD4Pbs12S45yP953-rvXhfrJTovfnJ4wP9Xy6BwB26E/s600/_News_Photo_image_large_68272.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="396" data-original-width="600" height="332" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiTRLt15tKQwaTVYsaZHKE5eUchRxJW5qaq466hEnOeJQHaX-UHOSdvOGB-3Ph1YCUbVNvzbBgzVKPSJiXLllXft4-r9wQU_3i-DvnygDBi5ipESr5bI0Cp9JaIcA00SQze6KEufTcVthJdTaMLbfD4Pbs12S45yP953-rvXhfrJTovfnJ4wP9Xy6BwB26E/w503-h332/_News_Photo_image_large_68272.jpg" width="503" /></a></div><br /><p></p><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Lo
que sabes de algo no es ese algo, lo que piensas de algo no es ese algo, lo que
percibes de algo no es ese algo, el nombre que le das no es ese algo. Lo que
crees que eres no eres tú, lo que piensas que eres no eres tú, lo que sabes de
ti no eres tú. </p><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;">Cualquier
objeto solo lo experimentas a través de las percepciones, lo conoces a través
de los sentidos codificados. Según tu experiencia, nada hay fuera de ti como
realidad independiente, separada y objetiva; solo sabes de ella a través de ti.
Que ese objeto pueda existir disociado de ti es una creencia, no una
experiencia. </p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;">Con
estos dos párrafos comienza la aventura de vuelta a casa. </p><p>
<br /></p><div class="blogger-post-footer">Textos Luis Amézaga. Búnker travestido.</div>Luis Amézagahttp://www.blogger.com/profile/14894828361586400904noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8806871423926858403.post-25453001515932484532024-01-20T07:06:00.000-08:002024-01-20T07:06:39.491-08:00Quienes habitan el planeta. En revista Letralia.<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh7iWHtnY6NHHpjnEGAauRxuP0ZTWV53g9E0U8AslNaU1YlAxvQyrdrcd9etZjP-Z8hbsBhqto7iEUVX39TJthcySlmiUWOIk28LWDIlMLOzNeMsDeAnBIkbW-JX0o0_u8G_N0tsGItVR97ncNSz7802FVtTRRQSD5Cmt_KvP-ioIGigwVpg5JWFi6xhbqt/s450/bicicleta%20accidente.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="325" data-original-width="450" height="338" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh7iWHtnY6NHHpjnEGAauRxuP0ZTWV53g9E0U8AslNaU1YlAxvQyrdrcd9etZjP-Z8hbsBhqto7iEUVX39TJthcySlmiUWOIk28LWDIlMLOzNeMsDeAnBIkbW-JX0o0_u8G_N0tsGItVR97ncNSz7802FVtTRRQSD5Cmt_KvP-ioIGigwVpg5JWFi6xhbqt/w468-h338/bicicleta%20accidente.jpg" width="468" /></a></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: left;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: left;"><span class="css-1qaijid r-bcqeeo r-qvutc0 r-poiln3" style="background-color: rgba(0, 0, 0, 0.03); border: 0px solid black; box-sizing: border-box; color: #0f1419; display: inline; font-family: TwitterChirp, -apple-system, BlinkMacSystemFont, "Segoe UI", Roboto, Helvetica, Arial, sans-serif; font-size: 15px; font-stretch: inherit; font-variant-east-asian: inherit; font-variant-numeric: inherit; line-height: inherit; list-style: none; margin: 0px; min-width: 0px; overflow-wrap: break-word; padding: 0px; text-overflow: unset; white-space: pre-wrap;">El mundo es un lugar abrupto y desencantado para criaturas con sensibilidad para la belleza y la justicia, como comprueba el protagonista de este relato del español Luis Amézaga. </span></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: left;"><span class="css-1qaijid r-bcqeeo r-qvutc0 r-poiln3" style="background-color: rgba(0, 0, 0, 0.03); border: 0px solid black; box-sizing: border-box; color: #0f1419; display: inline; font-family: TwitterChirp, -apple-system, BlinkMacSystemFont, "Segoe UI", Roboto, Helvetica, Arial, sans-serif; font-size: 15px; font-stretch: inherit; font-variant-east-asian: inherit; font-variant-numeric: inherit; line-height: inherit; list-style: none; margin: 0px; min-width: 0px; overflow-wrap: break-word; padding: 0px; text-overflow: unset; white-space: pre-wrap;"><br /></span></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: left;"><span style="color: #0f1419; font-family: TwitterChirp, -apple-system, BlinkMacSystemFont, Segoe UI, Roboto, Helvetica, Arial, sans-serif;"><span style="background-color: rgba(0, 0, 0, 0.03); font-size: 15px; white-space: pre-wrap;"><a href="https://letralia.com/letras/narrativaletralia/2024/01/20/quienes-habitan-el-planeta/" target="_blank">Relato "Quienes habitan el planeta" en la revista Letralia-Tierra de Letras. </a></span></span></div><p></p><div class="separator" style="clear: both;"><span class="r-18u37iz" style="background-color: rgba(0, 0, 0, 0.03); color: #0f1419; flex-direction: row; font-family: TwitterChirp, -apple-system, BlinkMacSystemFont, "Segoe UI", Roboto, Helvetica, Arial, sans-serif; font-size: 15px; white-space: pre-wrap;"><a class="css-1qaijid r-bcqeeo r-qvutc0 r-poiln3 r-1loqt21" dir="ltr" href="https://twitter.com/hashtag/narrativaletralia?src=hashtag_click" role="link" style="background-color: rgba(0, 0, 0, 0); border: 0px solid black; box-sizing: border-box; color: #1d9bf0; cursor: pointer; display: inline; font: inherit; list-style: none; margin: 0px; min-width: 0px; overflow-wrap: break-word; padding: 0px; text-align: inherit; text-decoration-line: none; text-overflow: unset; white-space: inherit;">#narrativaletralia</a></span></div><p><br /></p><div class="blogger-post-footer">Textos Luis Amézaga. Búnker travestido.</div>Luis Amézagahttp://www.blogger.com/profile/14894828361586400904noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8806871423926858403.post-37502525058325199122024-01-19T01:30:00.001-08:002024-01-19T01:30:00.147-08:00El zumbido del que subyace-62<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjDYkE06GPuwZxgeXz3XOSwj5EG9EBqUQWeQwqsh7UwGitgrqlfA2zzkbnIq7dozCSa-2tU7hyphenhyphennrtZr9FGUso-DXeGPQYyPQPrqHeGzEvQOW9vrAK9yVLS5qbGnU7KqGq_6wLLrxr5MAJvRDy9I4Xm0pUi6mhlWw8qnt1_7T0l4kOUa1iIBGFI75UppjgF9/s463/AGUACERO.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="448" data-original-width="463" height="391" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjDYkE06GPuwZxgeXz3XOSwj5EG9EBqUQWeQwqsh7UwGitgrqlfA2zzkbnIq7dozCSa-2tU7hyphenhyphennrtZr9FGUso-DXeGPQYyPQPrqHeGzEvQOW9vrAK9yVLS5qbGnU7KqGq_6wLLrxr5MAJvRDy9I4Xm0pUi6mhlWw8qnt1_7T0l4kOUa1iIBGFI75UppjgF9/w403-h391/AGUACERO.jpg" width="403" /></a></div><br /><p></p><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;">No
eres tú contra el mundo. El mundo no está contra ti. No hay dos bandos. Estamos
todos en el mismo equipo. Remamos en la misma dirección sin dirección. No hay
objetivo, no hay un plan, pero hay un clamor unísono por la realización del
Ser. Creador y creado son lo mismo. Sujeto y objeto son lo mismo. Observador y
observado son lo mismo. Apariencia distinta, sí, pero lo mismo. Como el agua es
la misma aunque su estado sea líquido, sólido o gaseoso. Solo se te antoja que
impera la desarmonía cuando a tu ideación le otorgas una credibilidad propia,
una entidad independiente del resto. Lo que consideras problemas son sacudidas
y acicates para que salgas de ese autoconfinamiento que es tener una idea
limitante de ti mismo y del mundo. La realidad no puede ser atrapada en una
foto fija. <span style="mso-spacerun: yes;"> </span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;"><span style="mso-spacerun: yes;"><br /></span></p><p></p><div class="blogger-post-footer">Textos Luis Amézaga. Búnker travestido.</div>Luis Amézagahttp://www.blogger.com/profile/14894828361586400904noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8806871423926858403.post-39444726272946110542024-01-16T01:30:00.001-08:002024-01-16T01:30:00.259-08:00El zumbido del que subyace-61<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgHBnOCy3EUOzTVKvtwB_K9YVq3AHwia0AhgWRy5dwYz7vOmRoZWo-SRRB6xmqx-XkNZGudLt2Sb3rZw20U7IOOFv1eDSX7z0kkrdsfc-7GWwM4vX3pFFGBpfaGs7ZF7AB98LL4bYK4GvSu7W8wEjWRlaqAGvvMeIkzR6kdxxRX8w0sAm_C4FXqrMrZNYor/s691/sombra.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="691" data-original-width="674" height="402" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgHBnOCy3EUOzTVKvtwB_K9YVq3AHwia0AhgWRy5dwYz7vOmRoZWo-SRRB6xmqx-XkNZGudLt2Sb3rZw20U7IOOFv1eDSX7z0kkrdsfc-7GWwM4vX3pFFGBpfaGs7ZF7AB98LL4bYK4GvSu7W8wEjWRlaqAGvvMeIkzR6kdxxRX8w0sAm_C4FXqrMrZNYor/w392-h402/sombra.jpg" width="392" /></a></div><br /><p></p><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;">La
personalidad consume mucha energía impropia en mantenerse brillante, ya que no
es autoluminosa. Cuanto menos personalidad, más presencia. Cuanto menos afán
por parte del personaje biográfico, más pujanza de la vida. Imagina que la
personalidad es ese instrumento que rompe el equilibrio de la orquesta porque
se siente con ganas de hacerse oír y convierte la armonía en ruido. El que se
aburre consigo mismo, el que no tiene suficiente con uno mismo, busca
construirse una personalidad para salir al mundo. Un papel que le ayuda a
ganarse un sitio en la sátira.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;"><br /></p><p></p><div class="blogger-post-footer">Textos Luis Amézaga. Búnker travestido.</div>Luis Amézagahttp://www.blogger.com/profile/14894828361586400904noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8806871423926858403.post-51170459843953171402024-01-13T01:30:00.001-08:002024-01-13T02:40:00.070-08:00El zumbido del que subyace-60<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjNEMyDhFDKKYjNMBeu5p2rNcMrRVmx7DdxWJXCPxLu8Lm83PO50gs0eylEURiTIsksLlxCshMxn3QWq2Mx_xk8h2y7n0myxHlasezP5_ER_Frua5fSR6hIfHkQ96lfU8-PdATdq33MvxzC0aiww6h20l9vBm64VKifbA0LSBAKYbT4sQBEixQuIhlcSsq5/s654/2010041320boyscoolINT_m.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="430" data-original-width="654" height="298" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjNEMyDhFDKKYjNMBeu5p2rNcMrRVmx7DdxWJXCPxLu8Lm83PO50gs0eylEURiTIsksLlxCshMxn3QWq2Mx_xk8h2y7n0myxHlasezP5_ER_Frua5fSR6hIfHkQ96lfU8-PdATdq33MvxzC0aiww6h20l9vBm64VKifbA0LSBAKYbT4sQBEixQuIhlcSsq5/w454-h298/2010041320boyscoolINT_m.jpg" width="454" /></a></div><br /><p></p><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;">Sabes
que eres. Pero ese ser te parece vacuo. Entonces piensas que debes llenarlo con
cosas que crees que eres: crees que eres hijo, crees que eres estudiante de
medicina, crees que eres amigo, crees que eres de izquierdas, crees que eres
novio, crees que eres padre, crees que eres médico, crees que eres viajero
empedernido, crees que eres aficionado a un equipo de fútbol, crees que eres
amable, crees que eres propietario de un apartamento, crees que eres creativo,
crees que eres religioso, crees que eres apasionado, crees que la vida está
siendo injusta, crees que eres artista, crees que eres tenaz, crees que eres
abuelo, crees que eres sabio, crees que eres jubilado, crees que te estás
muriendo. Nunca acabas de llenar ese vacío. La capacidad para convertir en pseudo-realidad la película que creemos ser viene de lo que somos y nunca nombramos. </p><br /><p></p><div class="blogger-post-footer">Textos Luis Amézaga. Búnker travestido.</div>Luis Amézagahttp://www.blogger.com/profile/14894828361586400904noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8806871423926858403.post-39811400616037013892024-01-10T01:30:00.001-08:002024-01-10T02:36:11.921-08:00El zumbido del que subyace-59<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg3b_LOM8ycCyZydhEjWz8uod26eWwnQb28mlyxnYwcFXcefmeeAzld59wHCrFZcnPAQ3qjC3yr-OnqekFPkH-lOC5L0ufiwX-LQCJ4wd1GV83ZlUNBBMJXFXQ62BCbY9BHK262fqYZCbYxDAFpZozd3Ok49OjjvzGvNcVmn95afSpvk6ic-gn1KBngq3tu/s480/SergeiRyshkov2.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="360" data-original-width="480" height="323" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg3b_LOM8ycCyZydhEjWz8uod26eWwnQb28mlyxnYwcFXcefmeeAzld59wHCrFZcnPAQ3qjC3yr-OnqekFPkH-lOC5L0ufiwX-LQCJ4wd1GV83ZlUNBBMJXFXQ62BCbY9BHK262fqYZCbYxDAFpZozd3Ok49OjjvzGvNcVmn95afSpvk6ic-gn1KBngq3tu/w431-h323/SergeiRyshkov2.jpg" width="431" /></a></div><br /><p></p><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;">Cualquier
cosa que conozcas, tú estabas antes para poder conocerla. Cualquier cosa que
experimentes, tú estabas antes para poder experimentarla. Cualquier cosa en la
que creas, tú estabas antes para poder creerla. Tú estabas antes. <span style="mso-spacerun: yes;"> </span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;">El individuo hace lo que puede hasta que descubre que no hay un "alguien" hacedor. A partir de entonces hace lo que quiere.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;"><br /></p><p></p><div class="blogger-post-footer">Textos Luis Amézaga. Búnker travestido.</div>Luis Amézagahttp://www.blogger.com/profile/14894828361586400904noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8806871423926858403.post-10388481455320919812024-01-07T01:30:00.001-08:002024-01-07T01:30:00.160-08:00El zumbido del que subyace-58<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiy_W3J94IXCD7DjMOeGYfEDxDgfDFrb7IeKlSBW9rgbJMWvtA6hXMoAcbUChgGJbThEcg0CZ5oMu303UjETHoGF-0bVUA9eGRhsGYWkF6pGec2xILS76mtQIoVGX4gDI5FdZ5tjfG-0ccWmLPHMX8ZMbqT8q4rxE7C8vLpHbredG_D2DyP33pHTK2QOK1e/s900/Eliara.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="900" data-original-width="900" height="382" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiy_W3J94IXCD7DjMOeGYfEDxDgfDFrb7IeKlSBW9rgbJMWvtA6hXMoAcbUChgGJbThEcg0CZ5oMu303UjETHoGF-0bVUA9eGRhsGYWkF6pGec2xILS76mtQIoVGX4gDI5FdZ5tjfG-0ccWmLPHMX8ZMbqT8q4rxE7C8vLpHbredG_D2DyP33pHTK2QOK1e/w382-h382/Eliara.jpg" width="382" /></a></div><br /><p></p><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;">Buscamos
en los excesos y en el autoengaño la suelta del relato mental que nos tiene atrapados
con su peso insoportable. Procuramos con diferentes sustancias la desinhibición,
el pensamiento más lento, el volumen más bajo.</p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;"><span style="mso-tab-count: 1;"> </span>En el orgasmo qué ocurre, cuál es su
principal motivo de placer: que dejamos de pensar, que se da un estado de nada
y relajación por ausencia del mecanismo controlador.</p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;"><span style="mso-tab-count: 1;"> </span>Qué buscamos y necesitamos del
estado de sueño profundo: dejar de tener como referencia a la mente. Es
indispensable este sueño diario para cargar la batería de nuestra materialidad.
Sin esa desconexión la energía vital se derrumbaría en poco tiempo. Aun así,
nos identificamos con la mente y su cuerpo, con la personalidad derivada que
nos provoca frustración, miedo, ansiedad, sensación de carencia... Solo en su
silencio encontramos un atisbo de paz.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></p><br /><p></p><div class="blogger-post-footer">Textos Luis Amézaga. Búnker travestido.</div>Luis Amézagahttp://www.blogger.com/profile/14894828361586400904noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8806871423926858403.post-531716066119776582024-01-04T01:30:00.001-08:002024-01-04T01:30:00.141-08:00El zumbido del que subyace-57<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhPfph7Affpunp85a1c6BWMtcu6FAtg4T_YT5SlhSXdZxfq-x8-88KT3Bb0SOYWWKZXrlyNe63xh8cTM9-fe82vbE68HbXHoI_s64OxraifY4zn8iXVoQrJmCS42sLZ-dRTL9_y97zLI5hI7N3XJ7zOUMD9w72-oJtgQIgXA6o5zBZaiAfl1SHyWfKrMCwU/s900/dia.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="451" data-original-width="900" height="252" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhPfph7Affpunp85a1c6BWMtcu6FAtg4T_YT5SlhSXdZxfq-x8-88KT3Bb0SOYWWKZXrlyNe63xh8cTM9-fe82vbE68HbXHoI_s64OxraifY4zn8iXVoQrJmCS42sLZ-dRTL9_y97zLI5hI7N3XJ7zOUMD9w72-oJtgQIgXA6o5zBZaiAfl1SHyWfKrMCwU/w504-h252/dia.jpg" width="504" /></a></div><br /><p></p><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;">El
instante vertical y el flujo de tiempos horizontales. El instante vertical es
uno y no es que dure mucho, es que no entiende de duración. Lo abarca todo en
este momento sin medición temporal y nunca aparece ni desaparece. Los instantes
horizontales se ponen muy juntitos dando la sensación de continuidad: son fotos
fijas que al surgir tan rápidamente y tan de seguido crean la sensación de
movimiento temporal, de película, de guión de nuestra vida. En realidad, los
instantes horizontales desaparecen en cuanto aparecen. Sobra decir<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>que lo que aparece y desaparece es
apariencia. </p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;">El
hecho fenoménico (lo que pasa), el relato mental (aquello que piensas que pasa),
el desarrollo de la personalidad por acumulación de experiencias, ideas,
emociones (aquél a quien le pasa). Tú no eres ninguno de ellos ni una
combinación de ellos. Eres el testigo que subyace a esa obra de ilusión
creativa, eres el soporte donde ocurre ese guión aderezado al gusto, eres la memoria
libre necesaria para que la memoria ocupada pueda ser operativa, eres el vacío
que posibilita la visibilidad de la materia. Eres intocable por el hecho
fenoménico, el relato mental y el desarrollo del ego. No eres algo en
evolución. Eres completo, acabado, realizado en sí. Eres anterior a la puesta
en escena, eres durante la función y sigues siendo cuando baja el telón. Eres
el instante vertical en el que el tiempo horizontal juega y exhibe sus trucos
de magia.</p><br /><p></p><div class="blogger-post-footer">Textos Luis Amézaga. Búnker travestido.</div>Luis Amézagahttp://www.blogger.com/profile/14894828361586400904noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8806871423926858403.post-41425596403546700122024-01-01T10:30:00.001-08:002024-01-01T10:30:00.142-08:00El zumbido del que subyace-56<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEilm-E4GQa_2MlOdCjy2-Kaz9XUsPaq3Ko4uNPrPMBrT_Cx1fxjEjQEDGCoHAG_7x20w91uGnHqFJBHRXj_Meg45CBnZ7LWp9WYNJuVf7e-w6QXPpv4ZCXJcORw0I8WzOIis-W-2Q7jHjtm03sNf7nMMAb2XJVbq2mzUKuvzpVZ_2LjYHeCZAMlioQ6KgL8/s1800/espiral.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1075" data-original-width="1800" height="315" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEilm-E4GQa_2MlOdCjy2-Kaz9XUsPaq3Ko4uNPrPMBrT_Cx1fxjEjQEDGCoHAG_7x20w91uGnHqFJBHRXj_Meg45CBnZ7LWp9WYNJuVf7e-w6QXPpv4ZCXJcORw0I8WzOIis-W-2Q7jHjtm03sNf7nMMAb2XJVbq2mzUKuvzpVZ_2LjYHeCZAMlioQ6KgL8/w528-h315/espiral.jpg" width="528" /></a></div><br /><p></p><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;">En
el estado de sueño, sueñas. En el estado de vigilia, sueñas que estás
despierto. Más allá y más acá de los estados, en la conciencia, estás despierto
jugando a los sueños. </p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;">Todo
cabe en la presencia. Todo. Tú puedes negarla, por supuesto, faltaría más. También
cabe su negación. Lo que no puede ella es negarte a ti, que es lo mismo que
negarse a sí misma. La presencia es afirmación sin límites. En esa su espiral,
cuyo punto de origen o final es el cráter de un volcán del cual surgen
emisiones sin descanso de calor y luz hacia la zona habitada por las formas más
diversas, nunca la multiplicidad es
incompatible con el uno. Las formas se expresan usando de soporte a la fuente
de calor y luz (sean conscientes de ello o no), y la fuente se manifiesta en sus
formas porque ha hecho un movimiento consciente. Un solo corazón, un solo
mecanismo, dos direcciones. Las diferentes formas se colocan en la espiral
donde consideran les es más idóneo. Nada ni nadie le indica a la forma el lugar
a ocupar, ella va tanteando hasta dar con ese su mirador o perspectiva desde donde
realiza el ser. Los diferentes puntos de la espiral no atienden a la lógica
mental de superior, inferior, mejor o peor. Los niveles vienen dados por la
elección de la distancia elegida respecto a la fuente. Hay formas que prefieren
más distancia, una luz más tenue, un temperatura más templada, incluso fría.
Otras prefieren el calor intenso de las proximidades del cráter, la luz
cegadora. Entre ambos extremos, cada forma va moviéndose y descansando en el sitio
que percibe como un traje hecho a medida. Todo está bien. Todo cabe. Cabe la unidad,
cabe la dualidad, cabe la multiplicidad, cabe el vacío y caben las formas y sus
peculiaridades; caben todos los caminos que llevan a Roma porque en realidad nunca
hemos salido de Roma. Aunque seamos capaces de describir con infinidad de
detalles esos caminos, no significa que nos hayamos alejado de Roma. Igual que puedes
describir con minuciosidad un sueño en el que has explorado tierras lejanas sin
moverte de la cama.</p><br /><p></p><div class="blogger-post-footer">Textos Luis Amézaga. Búnker travestido.</div>Luis Amézagahttp://www.blogger.com/profile/14894828361586400904noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8806871423926858403.post-31074871774147831672023-12-29T01:30:00.001-08:002023-12-29T01:30:00.141-08:00El zumbido del que subyace-55<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhz4Mp05kXGAiNCStlFSvIXtxwpM4qULARYeuWFTY0y4xMjcPLSisEv03gK-qmVlWWQQ4hMGeqkraERVyEuCvOVorB4sIobq68H3I94p02824Zi7oSGy2buSFThd_aNrP77pXcxYpbHWDXIvzXpnJuSOFiA_GFk7gwcei7xjYqHPOn86jP2fCOW-LXwsdyv/s577/VladimirKalinin.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="416" data-original-width="577" height="339" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhz4Mp05kXGAiNCStlFSvIXtxwpM4qULARYeuWFTY0y4xMjcPLSisEv03gK-qmVlWWQQ4hMGeqkraERVyEuCvOVorB4sIobq68H3I94p02824Zi7oSGy2buSFThd_aNrP77pXcxYpbHWDXIvzXpnJuSOFiA_GFk7gwcei7xjYqHPOn86jP2fCOW-LXwsdyv/w470-h339/VladimirKalinin.jpg" width="470" /></a></div><br /><p></p><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;">Comemos
la manzana y nos olvidamos del paraíso, nos sumergimos en la ideación y nos
olvidamos de la fuente original, de la memoria libre. Nos adentramos en la
pintura representativa y nos olvidamos de que bajo ella, como soporte, está el
lienzo en blanco. Somos criaturas de ida y vuelta, de expansión y contracción.
Estamos en el movimiento de expansión, en el movimiento de olvido, porque aún
creemos en el cultivo de manzanas con un aspecto y sabor superiores a las del
paraíso. Creemos en idear un mundo maravilloso, satisfactorio y completo,
creemos en representar una pintura genial que sea más pura que el lienzo en
blanco. Aún. Creemos que podemos construir algo mejor de lo que somos —y que
hemos olvidado que somos—, algo con más picante, quizá. ¿Cuánto tarda uno en
darse cuenta de que el picante excita, pero no alimenta?</p><br /><p></p><div class="blogger-post-footer">Textos Luis Amézaga. Búnker travestido.</div>Luis Amézagahttp://www.blogger.com/profile/14894828361586400904noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8806871423926858403.post-67338783942649858362023-12-26T01:30:00.001-08:002023-12-26T01:30:00.130-08:00El zumbido del que subyace-54<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh0iUJvqRotenieU7I8OMOoZhpDfTV0qo2Yl26xqujO2qiNPLObAZkg_kL5-5G5kZEH3sgo4WaboCkFEsuA6K5K2uOzk2lCjNq1od6H-Ep6gH5-J285wo4sN7cTLwWJAyUis2ka8Cnvk9-M_L_pjsGTV6fFPC9sl9NYnCiQB0pGo7ewCH6rLxs9wDbrF5yg/s733/IgorVorobe.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="733" data-original-width="550" height="417" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh0iUJvqRotenieU7I8OMOoZhpDfTV0qo2Yl26xqujO2qiNPLObAZkg_kL5-5G5kZEH3sgo4WaboCkFEsuA6K5K2uOzk2lCjNq1od6H-Ep6gH5-J285wo4sN7cTLwWJAyUis2ka8Cnvk9-M_L_pjsGTV6fFPC9sl9NYnCiQB0pGo7ewCH6rLxs9wDbrF5yg/w313-h417/IgorVorobe.jpg" width="313" /></a></div><br /><p></p><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;">La
vida es una celebración de la existencia que dura lo que dura una celebración.
La distorsión llega cuando cada uno de los invitados a la fiesta, a título
personal, se considera el homenajeado. Y claro, están tristes porque no reciben
la atención que esperaban; se sienten rechazados, mendicantes, solos.</p><br /><p></p><div class="blogger-post-footer">Textos Luis Amézaga. Búnker travestido.</div>Luis Amézagahttp://www.blogger.com/profile/14894828361586400904noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8806871423926858403.post-17243894997993954832023-12-23T01:30:00.001-08:002023-12-23T01:30:00.156-08:00El zumbido del que subyace-53<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjDInv_HQjBBQCMqFg7_EHw5J0LClLwGkFDsA8HLXE3NqsFrMIhvxuqMLybwJonr-F1TPmcWiTMvx_d28vPlF9YXTeG8MKh_qecJwqW8MlrslBxKZ80Vi3DH7i7uS-MZpAePKk-rXbmcGXxYuNQgaHsiOGTcSJbfyQ0YP-Cpr82KauAaf7xTf-pE-l4pfdQ/s608/sala%20de%20cine.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="405" data-original-width="608" height="298" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjDInv_HQjBBQCMqFg7_EHw5J0LClLwGkFDsA8HLXE3NqsFrMIhvxuqMLybwJonr-F1TPmcWiTMvx_d28vPlF9YXTeG8MKh_qecJwqW8MlrslBxKZ80Vi3DH7i7uS-MZpAePKk-rXbmcGXxYuNQgaHsiOGTcSJbfyQ0YP-Cpr82KauAaf7xTf-pE-l4pfdQ/w446-h298/sala%20de%20cine.jpg" width="446" /></a></div><br /><p></p><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;">Eres
el espectador mudo que observa en la oscuridad desde el fondo de la sala, el
que cuando llueve en la película no se moja, el que si tirotean al protagonista
no le alcanzan las balas, y si se enamora de la chica no le palpita el corazón.
Eres el que estaba antes de que el proyector se encendiera, el que está
mientras el proyector ilumina la pantalla, el que seguirá estando cuando el
proyector se apague, el que da sentido a todo lo que ocurre y que siempre es
testigo mudo sentado en la oscuridad al fondo de la sala. </p><br /><p></p><div class="blogger-post-footer">Textos Luis Amézaga. Búnker travestido.</div>Luis Amézagahttp://www.blogger.com/profile/14894828361586400904noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8806871423926858403.post-80548501566328268022023-12-21T14:13:00.000-08:002023-12-21T14:13:54.224-08:00El león bajo las bombas<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><iframe allowfullscreen='allowfullscreen' webkitallowfullscreen='webkitallowfullscreen' mozallowfullscreen='mozallowfullscreen' width='320' height='266' src='https://www.blogger.com/video.g?token=AD6v5dyvKFTyzvLWaNcAMXSusgaWp99QsCTk5s6_sg2CJCVzkKTOZmjXEyIB-7No2l39Zmr3zVYHPDZ6bPF9IAXwSQ' class='b-hbp-video b-uploaded' frameborder='0'></iframe></div><br /><p></p><p><br /></p><p><a href="https://margencero.es/margencero/el-leon-bajo-las-bombas/" target="_blank">"El león bajo las bombas", relato de Luis Amézaga</a></p><p><br /></p><div class="blogger-post-footer">Textos Luis Amézaga. Búnker travestido.</div>Luis Amézagahttp://www.blogger.com/profile/14894828361586400904noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8806871423926858403.post-53344546128374507652023-12-20T01:30:00.001-08:002023-12-20T01:30:00.137-08:00El zumbido del que subyace-52<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><br /><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiSWkS1nKVuFxruLLyXofqJjcdjQDVUUWrtKCwyMhhhagMWOgRRrlFqjrEBoFHuQ9Sol-qllogLhZVKccXPu8tTYOhVRFP6YdLxdq2I0nEvAG2FMJKTzNcZ3MvvKNe8flgC_In9Vq2BJYahhTQGx4Rdy9sAa544arnK-F6b80kWM1f_DOWQQ5Ez4GWZW6YW/s640/blandi-blub.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="640" data-original-width="512" height="358" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiSWkS1nKVuFxruLLyXofqJjcdjQDVUUWrtKCwyMhhhagMWOgRRrlFqjrEBoFHuQ9Sol-qllogLhZVKccXPu8tTYOhVRFP6YdLxdq2I0nEvAG2FMJKTzNcZ3MvvKNe8flgC_In9Vq2BJYahhTQGx4Rdy9sAa544arnK-F6b80kWM1f_DOWQQ5Ez4GWZW6YW/w286-h358/blandi-blub.jpg" width="286" /></a></div><br /><div><p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;">Surgen
pensamientos sobre el intelecto, sobre el cuerpo, sobre el alma, sobre la vida,
sobre la muerte, sobre el ser humano, sobre el mundo, sobre Dios. Pero ningún
pensamiento sabe quién soy yo. </p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;">El
pensamiento es como el blandiblú: puedes alargarlo, compactarlo, moldearlo.
Es pegajoso, chorreante y perfectamente inútil.</p><br /></div><div class="blogger-post-footer">Textos Luis Amézaga. Búnker travestido.</div>Luis Amézagahttp://www.blogger.com/profile/14894828361586400904noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8806871423926858403.post-23031634727713937612023-12-17T01:30:00.001-08:002023-12-18T02:43:51.855-08:00El zumbido del que subyace-51<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgHoGWV_JRbAktz2rXpqO0UohFMyDYkRYoTayfeUuurzXVPXvfcNA_UIO0llk91_PuG5cViogFHy5FGRdSir98iSR0NpmcE92INR-BDvIHVmMNg-tWMRGely3rVo900DeLvbi1GT20tJGo49QB117si0lqoiJnACsrVwHR97FT5NatAxTlwEZ3TsCvic4L6/s640/3316430.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="640" data-original-width="427" height="424" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgHoGWV_JRbAktz2rXpqO0UohFMyDYkRYoTayfeUuurzXVPXvfcNA_UIO0llk91_PuG5cViogFHy5FGRdSir98iSR0NpmcE92INR-BDvIHVmMNg-tWMRGely3rVo900DeLvbi1GT20tJGo49QB117si0lqoiJnACsrVwHR97FT5NatAxTlwEZ3TsCvic4L6/w283-h424/3316430.jpg" width="283" /></a></div><br /><p></p><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;">Lo
que protegemos es una idea de nosotros mismos. Una idea. Solo una idea que tiene
voluntad de perdurar. Pero las ideas no son; van y vienen. Y por mucho que parezcan importantes, y hayamos puesto en ellas nuestra supervivencia, carecen de entidad alguna.
</p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;">No estamos en un proceso de mejora, ni
nada puede recortar un nanómetro de lo que somos. Cada día percibimos matices
nuevos del ser, pero eso no significa que el ser mude o evolucione. Cada
momento es el mismo y cada momento tiene una frescura única. La paz es convivir
con los opuestos sin moverte con ellos, cohabitar con las paradojas y
contradicciones sin ser transformado por ellas.</p><br /><p></p><div class="blogger-post-footer">Textos Luis Amézaga. Búnker travestido.</div>Luis Amézagahttp://www.blogger.com/profile/14894828361586400904noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8806871423926858403.post-63168684849946974392023-12-14T12:26:00.001-08:002023-12-14T12:26:00.141-08:00El zumbido del que subyace-50<p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhMmzOVLDzKt_z0jTFdvBYVULWFDXlXxZcnPa-kdR10Q54_jNGpCihcnJIFZf1mNq8eRlpA5b_yFwD82Ia1RzGK3DKTFck4nNxiFiAtPp2iejYuVCsN8vGh88TGol8lGF70l7ktJi8k8bNPNhR0PrMXpI3uFTDCrlA67fJ9qpqYMamAsoSrkO9j19ChKBOZ/s800/viamuerta.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="600" data-original-width="800" height="346" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhMmzOVLDzKt_z0jTFdvBYVULWFDXlXxZcnPa-kdR10Q54_jNGpCihcnJIFZf1mNq8eRlpA5b_yFwD82Ia1RzGK3DKTFck4nNxiFiAtPp2iejYuVCsN8vGh88TGol8lGF70l7ktJi8k8bNPNhR0PrMXpI3uFTDCrlA67fJ9qpqYMamAsoSrkO9j19ChKBOZ/w461-h346/viamuerta.jpg" width="461" /></a></div><p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;">Consolidarse
en el silencio despierto es el inicio, no el final. Un inicio sin fin. Un
inicio sin disparo de salida. Las formas son tiempo. Las formas necesitan
tiempo para avenirse a lo que no tiene forma. </p><br /><p></p><div class="blogger-post-footer">Textos Luis Amézaga. Búnker travestido.</div>Luis Amézagahttp://www.blogger.com/profile/14894828361586400904noreply@blogger.com0