domingo, 15 de mayo de 2022

La danza del espacio infinito -137

 


Iba a escribir un libro sobre las agitaciones diarias de una vagabunda, pero he pensado que los lectores que se pudieran sentir identificados con ella, no tendrían dinero para comprar un ejemplar. Así que he virado el argumento hacia una mujer en posición acomodada, que por diferentes circunstancias adversas de la vida, ha acabado vagabundeando por las calles. Pero me he dado cuenta de que los adinerados no quieren leer sobre un augurio cenizo, ni imaginarse desposeídos de su fortuna. Tampoco vendería ni un ejemplar. Así que le he dado otra vuelta; por qué no escribir sobre una vagabunda que tocada por la varita de la fortuna abandona sus cartones y sus perros callejeros y se asienta entre la clase alta de la sociedad. Pero he pensado que los que podrían comprar ese libro tampoco les gustaría ver cómo su cortijo de privilegios puede ser asaltado por cualquier trepa de la buena suerte. No se sienten a gusto con los advenedizos. Así que no voy a escribir sobre vagabundas. Lo que vende es el estilo de vida de las Kardashian, sobre todo entre los más necesitados. Por qué arriesgar.  


1 comentario:

Anónimo dijo...

No desgastes tus yemas…, es genial