martes, 18 de junio de 2024

Escena, escenario y actor.

 


No hay problema con la escena que aparece en ti: dinámica y cambiante. La escena se da siempre en el escenario que eres: constante e imperturbable. La idea de conflicto viene con la añadida figura del actor en la escena que se siente diferente a ésta y al escenario. La idea de problema nace cuando el ilusorio actor considera que las cosas le ocurren a él, o que él las hace y fuerza a voluntad, que él es el protagonista, que la escena tiene una intención y significaciones elaboradas, que la escena tiene una causa y un efecto, que el universo entero está confabulado para que él sienta esto y lo otro. El actor no quiere que se apaguen las luces, que se baje el telón, que la escena desemboque en el silencio, porque entonces se toparía con su propia inexistencia.


viernes, 7 de junio de 2024

El Personaje.


Todos los esfuerzos van destinados a realizar, satisfacer y mejorar el personaje que interpretamos. Las posibilidades de conseguirlo son similares a saciar la voracidad de un agujero negro. El personaje tiene un breve y ficticio cameo, pero se le ha subido la fama a la cabeza. Su conocimiento, con los pies de barro, está basado en la ignorancia de creer que el mundo es una realidad preexistente en la cual él aterriza.

Las imágenes solo aparecen cuando abres los ojos, ni un milisegundo antes. La mente es algo que ocurre, no algo que seas. Lo que el personaje encuentra al final de su actuación es lo mismo que al principio: una nada absoluta. Y así está bien. Y así debe ser. 


 

martes, 28 de mayo de 2024

Por lo alrededores del mañana.

 


Este texto forma parte de la antología publicada por Letralia el 20 de mayo de 2024 en su 28º aniversario. Bestiario Artificial.

"Por los alrededores del mañana". de Luis Amézaga.

Las personas más ignorantes, y por lo tanto más temerosas, veían en Dorotea un peligro para la propia especie humana. “¡Como si fuésemos una especie destinada a no extinguirse!” Otros, en cambio, veían en Dorotea una esperanza de supervivencia de la especie humana en condiciones diferentes y con posibilidades de alcanzar partes del universo hoy ni siquiera soñadas.




jueves, 14 de marzo de 2024

El zumbido del que subyace-72

 


Parte desde donde estés: coge tus ideas, tu situación vivencial, lo que piensas de ti, tus creencias, y mételas en la mochila. Échate la mochila a la espalda y ponte a andar como un peregrino sin destino. La vida es una búsqueda del tesoro. ¿Por qué da igual cuál sea tu equipaje? Porque a los pocos kilómetros te darás cuenta de que andas demasiado despacio por culpa del peso, así que sacarás (sean las que sean) tus circunstancias de la mochila y las dejarás a un lado del camino. ¡Así da gusto caminar! Después de meses de caminata aparentemente desorientada, asumes que no vas a ninguna parte, que no sabes en qué consiste el tesoro que buscas. Tú escondiste el tesoro, tú lo has estado buscando y tú eres el mismo tesoro. El paisaje y el camino se transforman en atrezzo, en música de fondo. Vuelves sobre tus pasos, pero no son los mismos pasos. Vuelves porque eres un peregrino para quien ninguna tierra es extraña ni ningún camino es de huida.  


martes, 27 de febrero de 2024

El zumbido del que subyace-71

 


Pensamos que la compasión es algo connatural a una buena persona. No lo es. Una buena persona es solo una buena persona. No posee ninguna condición diferente respecto a lo que calificamos como mala persona. La compasión nada tiene que ver con los buenos sentimientos, ni con la filantropía, ni con una actitud moral. La compasión no puede surgir de la persona, sino de lo impersonal. La compasión es no confundirse con lo falso, con la pasión; es abrir espacio a lo real, reconocer al ser aunque la persona se empeñe en amordazarse en sus condicionamientos de tiempo, espacio, memoria e historia melodramática.  


jueves, 22 de febrero de 2024

El zumbido del que subyace-70

 


Construyes una caja y no necesitas meter espacio en ella. No hay un espacio dentro de la caja y otro fuera. Es la caja la que ha aparecido en el espacio. La caja es el cuerpo. El espacio no está dentro del cuerpo, es el cuerpo el que está en el espacio. ¿Quieres descubrir cuál es tu identidad en esta analogía? Tú eres el espacio continuo e infinito. A diferencia de la caja, del cuerpo, tú no apareces en un momento dado. Cuando tiras la caja al contenedor no tiras con ella el espacio. El espacio permanece inalterado. Tú permaneces intacto aunque tiren el cuerpo al contenedor, lo metan bajo tierra o lancen al mar sus cenizas. El espacio no va a ninguna parte ni viene de ninguna parte.  


jueves, 15 de febrero de 2024

El zumbido del que subyace-69

 


A cada paso una puerta que lleva a ti mismo. A cada edad muerta —y ya llevas unas cuantas— se abre una puerta a ti mismo. Cada sueño de cada noche, cada niebla antes de la vigilia, cada día de ajetreo, una puerta que lleva a ti mismo. Cada viaje y cada aventura por el mundo se abre una puerta que lleva a ti mismo. Nunca se acabarán las opciones de ti mismo. Nadie te mete prisa, prueba todo lo que consideres oportuno, juega a todos los juegos, engorda el ego con comida basura, haz lo que tengas que hacer, pero alguna vez, aunque sea por descarte o curiosidad, cruza esa puerta que lleva a ti mismo.


sábado, 10 de febrero de 2024

El zumbido del que subyace-68

 


La facultad sensorial otorga la experiencia y crea la escena. Sin la facultad sensorial no hay contenido. Pero los sentidos, a su vez, necesitan un soporte vital para operar. Sin ese soporte, el cuerpo caería desplomado al suelo desapareciendo cualquier experiencia. Ese soporte eres tú. No tiene nada que ver con el cuerpo ni con sus funciones. Ese soporte es el que permite reconocerte a pesar de los cambios aparentes de la forma. Da igual que te trasplanten el corazón, el hígado, los riñones, los genitales, que te renueven toda la sangre, que te cambien la cara con cirugía estética. Sabes que eres tú. No de forma intelectual, sino íntima, el saber que es indubitable. Da igual que tu cuerpo y tu mente con diez años nada tengan que ver con tu cuerpo y mente de cincuenta años. Sabes que eres tú, el mismo. Da igual que tus pensamientos, ideas y creencias hayan cambiado. Sabes que eres tú, el mismo. Da igual que estés en el estado de vigilia con los sentidos a pleno rendimiento o en sueño profundo sin referencia del cuerpo ni del mundo. Eres tú. Esa continuidad es porque tú no cambias. Lo que no cambia es lo único real en estado puro.


sábado, 3 de febrero de 2024

El zumbido del que subyace-67

 


Es este instante. No hay otro. Es vertical. En la línea vertical no hay diferencias, sea cual sea la altura a la que te sitúes. Las diferencias son propias de la línea horizontal, temporal, de los cambios en la forma. Este instante es el aquí y el ahora, sin otro aquí y ahora. Este instante es el ser atento a sí mismo. Cuando el ser se expande y está atento a esa expansión aparece el universo, y sus formas adquieren perspectiva. El ser es uno, sus movimientos son dos: contracción y expansión.

Estás en una habitación: hay un escritorio, una silla, unas baldas, una cama, un armario, una ventana, una puerta, un cuerpo humano (con el que te identificas), una lámpara, un suelo, una alfombra y cuatro paredes. Para observar la escena en su totalidad y libertad, el testigo no puede asumir un centro de observación desde ninguna de las formas que pueblan la habitación. ¿Desde dónde concibe la escena entonces? Desde el espacio vacío. Ese es el estado natural del ser.


miércoles, 31 de enero de 2024

El zumbido del que subyace-66

 


La belleza de la Luna llena reside en su vacío y en que no espera nada de ti. La belleza de la Luna llena proviene de una luz que no es suya, prestada por un amor desinteresado de estrella. La belleza de la Luna llena está en tus ojos, que miran lejos como si estuviera cerca. La belleza del Cosmos mora dentro de ti. Vuelve la atención hacia dentro, encontrarás un descomunal agujero negro. La mente abandona las formas dispersas por el universo y atrae la materia hacia su horizonte de eventos. Las criaturas de gas bajan en espiral hasta que se funden con lo incorpóreo. El agujero negro de tu interior no tiene bordes ni superficies rígidas, no posee atributos externos visibles, en él millones de galaxias se concentran en la punta de un lápiz, logrando un poder de atracción infinito, una densidad inusitada. En él se produce la singularidad, las leyes de la física dejan de funcionar, el espacio-tiempo se convierte en una ideación limitante. La característica que más impresiona de este agujero negro de tu corazón es la combinación de simplicidad y poder. De la succión de todo lo visible extrae su invisibilidad.  


domingo, 28 de enero de 2024

El zumbido del que subyace-65

 


Muchos son los maestros, sabias sus palabras. La realización en ellos no se pone en duda. Y, sin embargo, en ocasiones sus analogías, sus señalizaciones, sus mensajes saben a comida recalentada. La frescura de la presencia queda solapada por el discurso. Alguien con sincero anhelo de estabilizar su libertad, no busca en el maestro sus palabras, ni la transmisión directa de la iluminación, ni experiencias extrasensoriales; sólo quiere su compañía, contemplar cómo prepara la comida, riega las plantas, pinta una pared, se atusa el pelo, se toma una copa de vino. Sólo quiere comprobar de primera mano,  sobre el terreno, eso que parece imposible a ojos de  alguien con la libertad sin estabilizar: cómo se compatibilizan dos estados aparentemente opuestos, cómo casa lo mundano con la realidad del espíritu. El maestro cree que debe decir algo, pero el discípulo le ruega que se calle porque está a punto de descubrir que nada es incompatible con la unicidad del espacio sin bordes al verle pelar una manzana.


jueves, 25 de enero de 2024

El zumbido del que subyace-64

 


Cuando lo que eres se aviene a ser percibido por tus sentidos es como experimentar la vastedad de la naturaleza a través de un tiesto en tu ventana.

La mente es contenido hipnótico. La conciencia es continente impersonal. Puede haber continente sin contenido, pero no al revés. La mente puede morir de inanición por falta de atención. Esa muerte en vida le hará brillar como nunca, porque es una muerte del contenido manoseado, del plato recalentado de la memoria. La conciencia de ser acaba por disolverse en el ser que no precisa de conciencia. El sufrimiento viene de creer que el contenido, bien hilado y de apariencia continua, es lo fundamental. La continuidad solo la posibilita el continente.  

La mente, aunque parezca colaborar en su propia destitución de anquilosadas costumbres, guarda tensiones en el cuerpo que desembalsa de manera abrupta e inesperada, mostrando aún su desarmonía con el papel secundario de colorear que le corresponde. Esas pataletas desaparecerán si no les prestas atención, si a la mente no le cedes tu identidad. Es tu atención y el otorgamiento de importancia lo que las provoca y agranda. Mantente en ti ¿Dónde si no? En el fondo del océano, donde el oleaje no interrumpe la paz.


lunes, 22 de enero de 2024

El zumbido del que subyace-63

 


 Lo que sabes de algo no es ese algo, lo que piensas de algo no es ese algo, lo que percibes de algo no es ese algo, el nombre que le das no es ese algo. Lo que crees que eres no eres tú, lo que piensas que eres no eres tú, lo que sabes de ti no eres tú. 

Cualquier objeto solo lo experimentas a través de las percepciones, lo conoces a través de los sentidos codificados. Según tu experiencia, nada hay fuera de ti como realidad independiente, separada y objetiva; solo sabes de ella a través de ti. Que ese objeto pueda existir disociado de ti es una creencia, no una experiencia. 

Con estos dos párrafos comienza la aventura de vuelta a casa.  


sábado, 20 de enero de 2024

Quienes habitan el planeta. En revista Letralia.

 


El mundo es un lugar abrupto y desencantado para criaturas con sensibilidad para la belleza y la justicia, como comprueba el protagonista de este relato del español Luis Amézaga.


viernes, 19 de enero de 2024

El zumbido del que subyace-62

 


No eres tú contra el mundo. El mundo no está contra ti. No hay dos bandos. Estamos todos en el mismo equipo. Remamos en la misma dirección sin dirección. No hay objetivo, no hay un plan, pero hay un clamor unísono por la realización del Ser. Creador y creado son lo mismo. Sujeto y objeto son lo mismo. Observador y observado son lo mismo. Apariencia distinta, sí, pero lo mismo. Como el agua es la misma aunque su estado sea líquido, sólido o gaseoso. Solo se te antoja que impera la desarmonía cuando a tu ideación le otorgas una credibilidad propia, una entidad independiente del resto. Lo que consideras problemas son sacudidas y acicates para que salgas de ese autoconfinamiento que es tener una idea limitante de ti mismo y del mundo. La realidad no puede ser atrapada en una foto fija.  


martes, 16 de enero de 2024

El zumbido del que subyace-61

 


La personalidad consume mucha energía impropia en mantenerse brillante, ya que no es autoluminosa. Cuanto menos personalidad, más presencia. Cuanto menos afán por parte del personaje biográfico, más pujanza de la vida. Imagina que la personalidad es ese instrumento que rompe el equilibrio de la orquesta porque se siente con ganas de hacerse oír y convierte la armonía en ruido. El que se aburre consigo mismo, el que no tiene suficiente con uno mismo, busca construirse una personalidad para salir al mundo. Un papel que le ayuda a ganarse un sitio en la sátira.


sábado, 13 de enero de 2024

El zumbido del que subyace-60

 


Sabes que eres. Pero ese ser te parece vacuo. Entonces piensas que debes llenarlo con cosas que crees que eres: crees que eres hijo, crees que eres estudiante de medicina, crees que eres amigo, crees que eres de izquierdas, crees que eres novio, crees que eres padre, crees que eres médico, crees que eres viajero empedernido, crees que eres aficionado a un equipo de fútbol, crees que eres amable, crees que eres propietario de un apartamento, crees que eres creativo, crees que eres religioso, crees que eres apasionado, crees que la vida está siendo injusta, crees que eres artista, crees que eres tenaz, crees que eres abuelo, crees que eres sabio, crees que eres jubilado, crees que te estás muriendo. Nunca acabas de llenar ese vacío. La capacidad para convertir en pseudo-realidad la película que creemos ser viene de lo que somos y nunca nombramos.  


miércoles, 10 de enero de 2024

El zumbido del que subyace-59

 


Cualquier cosa que conozcas, tú estabas antes para poder conocerla. Cualquier cosa que experimentes, tú estabas antes para poder experimentarla. Cualquier cosa en la que creas, tú estabas antes para poder creerla. Tú estabas antes.  

El individuo hace lo que puede hasta que descubre que no hay un "alguien" hacedor. A partir de entonces hace lo que quiere.


domingo, 7 de enero de 2024

El zumbido del que subyace-58

 


Buscamos en los excesos y en el autoengaño la suelta del relato mental que nos tiene atrapados con su peso insoportable. Procuramos con diferentes sustancias la desinhibición, el pensamiento más lento, el volumen más bajo.

            En el orgasmo qué ocurre, cuál es su principal motivo de placer: que dejamos de pensar, que se da un estado de nada y relajación por ausencia del mecanismo controlador.

            Qué buscamos y necesitamos del estado de sueño profundo: dejar de tener como referencia a la mente. Es indispensable este sueño diario para cargar la batería de nuestra materialidad. Sin esa desconexión la energía vital se derrumbaría en poco tiempo. Aun así, nos identificamos con la mente y su cuerpo, con la personalidad derivada que nos provoca frustración, miedo, ansiedad, sensación de carencia... Solo en su silencio encontramos un atisbo de paz.